El testigo
Una irónica revisión de los mitos y de la condición mediática del mundo contemporáneo.
Con epílogo de Vicente Leñero.
Julio Valdivieso, intelectual mexicano emigrado a Europa, vuelve a su país después de una larga ausencia. El PRI ha perdido al fin las elecciones y se inicia un peculiar período de transición. Julio vuelve a ese tiempo extraño de los regresos, donde se reencuentra con lo que pudo ser. En ese retorno extático y terrible se enfrenta a las claves de un amor perdido, la leyenda viva del poeta Ramón López Velarde, un episodio de la guerra cristera que depende de su propio nombre. En un singular rito de paso, regresa a una Ítaca azotada por el crimen organizado, la política entendida como conspiración, un México donde las cuentas mal saldadas de la Revolución regresan con aire de tragicomedia y la épica se vuelve telenovela.
Irónica revisión de los mitos y la condición mediática del mundo contemporáneo, exultante reivindicación de la poesía como sustrato perdurable en el caos de la historia, El testigo es una de las novelas más estimulantes de la literatura contemporánea.
«Una meditación sostenida sobre el papel del testigo... Un mundo ficticio excepcionalmente vívido y una demostración del poder testimonial de la ficción» (Chris Andrews, Times Literary Supplement).
«Gran novela de los fracasos de nuestros tiempos» (J. E. Ayala-Dip, El País).
«Una de esas obras mayores que dan sentido a una vida en la literatura» (Christopher Domínguez Michael, Reforma).
«Novela totalizadora en su estado más puro» (J. A. Masoliver Ródenas).
«Recupera el ideal de la novela total en la que ficción y reflexión se complementan admirablemente» (G. Niño de Guzmán, El Comercio).
«Villoro avanza en la tradición y la convierte en vanguardia, organizando un juego de espejos donde se revelan las imágenes diversas de América y Europa» (Hugo Chaparro Valderrama, Pie de Letra).
«Cuando ya a nadie se le ocurría ni preguntar si es posible escribir la Gran Novela Mexicana, Villoro puso una en la mesa» (Álvaro Enrigue, Letras Libres).
RESEÑAS DE PRENSA
Una irónica revisión de los mitos y de la condición mediática del mundo contemporáneo.
Con epílogo de Vicente Leñero.
Julio Valdivieso, intelectual mexicano emigrado a Europa, vuelve a su país después de una larga ausencia. El PRI ha perdido al fin las elecciones y se inicia un peculiar período de transición. Julio vuelve a ese tiempo extraño de los regresos, donde se reencuentra con lo que pudo ser. En ese retorno extático y terrible se enfrenta a las claves de un amor perdido, la leyenda viva del poeta Ramón López Velarde, un episodio de la guerra cristera que depende de su propio nombre. En un singular rito de paso, regresa a una Ítaca azotada por el crimen organizado, la política entendida como conspiración, un México donde las cuentas mal saldadas de la Revolución regresan con aire de tragicomedia y la épica se vuelve telenovela.
Irónica revisión de los mitos y la condición mediática del mundo contemporáneo, exultante reivindicación de la poesía como sustrato perdurable en el caos de la historia, El testigo es una de las novelas más estimulantes de la literatura contemporánea.
«Una meditación sostenida sobre el papel del testigo... Un mundo ficticio excepcionalmente vívido y una demostración del poder testimonial de la ficción» (Chris Andrews, Times Literary Supplement).
«Gran novela de los fracasos de nuestros tiempos» (J. E. Ayala-Dip, El País).
«Una de esas obras mayores que dan sentido a una vida en la literatura» (Christopher Domínguez Michael, Reforma).
«Novela totalizadora en su estado más puro» (J. A. Masoliver Ródenas).
«Recupera el ideal de la novela total en la que ficción y reflexión se complementan admirablemente» (G. Niño de Guzmán, El Comercio).
«Villoro avanza en la tradición y la convierte en vanguardia, organizando un juego de espejos donde se revelan las imágenes diversas de América y Europa» (Hugo Chaparro Valderrama, Pie de Letra).
«Cuando ya a nadie se le ocurría ni preguntar si es posible escribir la Gran Novela Mexicana, Villoro puso una en la mesa» (Álvaro Enrigue, Letras Libres).