CATÁLOGO | Panorama de narrativas
Argos el ciego
«Perdida por timidez la ocasión de morir, un escritor infeliz decide curarse escribiendo un libro feliz. Pide su argumento, según costumbre, a los cien ojos de la memoria y a las lisonjas de la juventud.»
Así empieza Argos el ciego, la segunda novela de Gesualdo Bufalino tras la fulgurante revelación de Perorata del apestado, publicada también en esta colección.
El narrador, asediado por el invierno en un hotel de Roma, evoca, para curarse de sus accesos de angustia, antiguas aventuras en el corazón del Sur, en tiempos de su juventud. Resulta así un desdoblamiento en dos ciudades y edades distintas, con máscaras alternas, en vaivenes entre abandono e impostura, entre desahogos ingenuos y astutos desvaríos. Un diario-novela que puede leerse como balada de las damas de antaño, o como «mea culpa» de un viaje que vanamente se obstina a promover en leyenda, mediante hilarotrágicos engranajes de palabras, su pobre «vita nuova» .
«Libro rico como una cantera, fulgurante de gemas... Toca cuerdas de indeleble ternura, pero también de dulce ironía, de divertimento adolescente, de patética bufonería, de amorosa malicia senil.» (Nicola Muschitello, Manifesto)
«Barroco, suntuoso, desgarrado, lujuriante... Hecho con pasta baudeleriana... Bufalino no es un esclavo de la realidad. Es metafórico, alusivo, docto, ora cortante como un cuchillo, ora sinuoso como los velos de una odalisca.» (Giovanni Arpino, Il Giornale)
«Bufalino confirma haber querido escribir una "opereta moral con música de Offenbach"; de hecho, como en una conseguida opereta, el tono "frígido" de la ironía y el tono "pasional" del lirismo están hábilmente mezclados.» (Raffaele Crovi, L'Ecco della Stampa)
«Argos el ciego es el maravilloso reflejo de una vita nuova dantesca: el diario de una iniciación a la edad adulta, al amor, al dolor... Una obra maestra.» (Giovanni Pacchiano, L'Europeo)
«Perorata del apestado impresionó por la calidad de la escritura y la intensidad de la historia. Su segunda novela, Argos el ciego confirma definitivamente el talento de narrador.» (Franco Marcoaldi, Panorama)
RESEÑAS DE PRENSA
«Perdida por timidez la ocasión de morir, un escritor infeliz decide curarse escribiendo un libro feliz. Pide su argumento, según costumbre, a los cien ojos de la memoria y a las lisonjas de la juventud.»
Así empieza Argos el ciego, la segunda novela de Gesualdo Bufalino tras la fulgurante revelación de Perorata del apestado, publicada también en esta colección.
El narrador, asediado por el invierno en un hotel de Roma, evoca, para curarse de sus accesos de angustia, antiguas aventuras en el corazón del Sur, en tiempos de su juventud. Resulta así un desdoblamiento en dos ciudades y edades distintas, con máscaras alternas, en vaivenes entre abandono e impostura, entre desahogos ingenuos y astutos desvaríos. Un diario-novela que puede leerse como balada de las damas de antaño, o como «mea culpa» de un viaje que vanamente se obstina a promover en leyenda, mediante hilarotrágicos engranajes de palabras, su pobre «vita nuova» .
«Libro rico como una cantera, fulgurante de gemas... Toca cuerdas de indeleble ternura, pero también de dulce ironía, de divertimento adolescente, de patética bufonería, de amorosa malicia senil.» (Nicola Muschitello, Manifesto)
«Barroco, suntuoso, desgarrado, lujuriante... Hecho con pasta baudeleriana... Bufalino no es un esclavo de la realidad. Es metafórico, alusivo, docto, ora cortante como un cuchillo, ora sinuoso como los velos de una odalisca.» (Giovanni Arpino, Il Giornale)
«Bufalino confirma haber querido escribir una "opereta moral con música de Offenbach"; de hecho, como en una conseguida opereta, el tono "frígido" de la ironía y el tono "pasional" del lirismo están hábilmente mezclados.» (Raffaele Crovi, L'Ecco della Stampa)
«Argos el ciego es el maravilloso reflejo de una vita nuova dantesca: el diario de una iniciación a la edad adulta, al amor, al dolor... Una obra maestra.» (Giovanni Pacchiano, L'Europeo)
«Perorata del apestado impresionó por la calidad de la escritura y la intensidad de la historia. Su segunda novela, Argos el ciego confirma definitivamente el talento de narrador.» (Franco Marcoaldi, Panorama)